sábado, 25 de octubre de 2008

Como recordar los sueños

Los sueños tiene lugar en la fase REM que en la mayoría de las personas sólo supone una pequeña porción del tiempo que se está durmiendo y tendemos a olvidarlos al poco de despertarnos. Algunas veces tenemos sueños muy desagradables y nos alegramos de despertar y volver a la seguridad del mundo real. Pero en otras ocasiones nos sirven para vivir experiencias muy interesantes y que te dejan con ganas de volver a la cama para recuperar... ese sueñecillo tan bueno que estaba teniendo...zzzzzzz

Para lograr recordar un mayor número podemos seguir cualquiera de estas estrategias:

1. Despertarse más a menudo cerca durante la fase REM del sueño.

Si no sueles soñar y el tiempo que duermes varía de un día para otro habrá alguna ocasión en la que te des cuenta de que has tenido un sueño aunque se te olvide de que trataba. Eso significa que te has despertado en la fase REM. Anota el tiempo que estuviste durmiendo y prueba a la noche siguiente dormir un periodo de tiempo similar.
Una aproximación más agresiva es programar el despertador para que suene a intervalo de 90 minutos. Durante una noche lo más probable es que alguna de las veces des con un sueño.
Y claro, para estar expuesto a aún más sueños puedes probar el sueño polifásico.

2. Lleva un diario de sueños

Piensa en el sueño que has tenido.
Una vez que has dado con un sueño, no vuelvas simplemente a acostarte. Siéntate en la cama y recuerda qué estabas haciendo en el sueño, cómo llegaste a allí, con quién hablabas, por qué estabas haciendo esas cosas. Esto te permite, por una recuperar más datos de ese sueño en concreto y por otra entrenar a tu cerebro para que recuerde con más facilidad otros que tengas más adelante.

Anota a grandes rasgos lo que has recuperado de ese sueño.
Te servirá para aprender muchas cosas sobre ti, para escribir un blog o para comentarlo con el psicólogo pero lo más importante es que refuerza el paso anterior y evita que caigas en la tentación de tirarte de nuevo a la cama.

Combinando estas dos estrategias podrás recordar un mayor número de sueños vividos y te permitirá saltar al siguiente nivel, el de los sueños lúcidos.

Gestión del tiempo: Paso 3

Gestión del tiempo

Piensa en el tiempo como si fuera un continuo en el que no hubiera eventos relevantes que lo divida en periodos más manejables. Si, con un patrón de sueño polifásico, niegas la relevancia de tu ciclo de cuatro horas te quedas sin claves temporales (Zeitgeber) a corto plazo. Pero por otro lado, si niegas la importancia del ciclo circadiano pierdes contacto con el mundo.

Para tener Zeitgebers con mi nuevo patrón de sueño debería ser constante en las horas a las que duermo siestas. Si casi todos los monofásicos duermen de noche yo debería dormir siempre a las mismas horas. El problema es que el resto de la gente sigue concentrando su actividad en torno a las mismas 16 horas y ... ¡yo también quiero participar!

Imagínate que día tras día durante seis horas SEGUIDAS (la tercera parte de tu tiempo de vigilia) no pudieras relacionarte con nadie porque todos se ponen de acuerdo para no hacer nada en absoluto, lo que incluye no sólo hablar y divertirse sino que afecta también a tu actividad productiva (la consulta está cerrada de noche y en conserjería no te van a dar las llaves de la oficina para que ordenes los documentos) y a tus hábitos de consumo (no puedo comprar pan a las 03:00 en mi barrio).


Mis actividades quedan divididas, por tanto, en 3 categorías:

A. Lo que puedo hacer sólo en un momento determinado
B. Lo que sólo puedo hacer en una franja de tiempo determinada
C. Lo que se puede hacer en cualquier momento

En A se incluyen tareas como reuniones, clases, estar en el puesto de trabajo
En B se encuentran actividades que tienen requieren menor grado de planificación y compromiso que A. Por ejemplo, si puedes elegir el momento de una reunión pero todavía no has comunicado cuando tendrá lugar, esa actividad sigue en el grupo B.
Las tareas C son las que no dependen de ningún factor externo para determinar el momento de la semana de realizarlas.

Como te darás cuenta estas categorías no son específicas para el sueño polifásico sino que pueden ser útiles a todos los que necesitan utilizar de forma más eficiente su tiempo. Para un polifásico estas tareas deben encajarse en en la semana de 22x7 horas para un monofásico en la de 16x7 horas. No hay mayor diferencia. Lo importante es asignarle tiempo a esas tareas siempre en ese orden. Después de haber determinado que tareas has elegido hacer, claro.

Auditoría

¿Por qué me he vuelto a quedar dormido?

Variables fisiológicas

En los últimos ciclos he llegado a alcanzar una muy buena adaptación a las siestas de 25 minutos. Descanso, siento como si hubieran pasado varias horas, sueño y puedo recordar los sueños completos. Incluso parece que empiezo a tener más facilidad para los sueños lúcidos. Todo parece ir bien si me fijo sólo en cada ciclo.

Sin embargo, al prestar atención a periodos más amplios de tiempo se presentan algunas dificultades.
Mi cuerpo sigue teniendo ciclos circadianos. Después de la siesta que se sitúa en torno a la franja horaria 06:00-08:00 mi cuerpo me dice que duerma, independientemente de como me encontrara unos minutos antes.

Practicamente he acabado con todas las frutas y verduras que tengo en casa. Ayer consumí gran cantidad de alimentos ricos en hidratos de carbono, más lentos de digerir.

He vuelto a mi patrón anterior de actividad deportiva, es decir, irregular por debajo de la media recomendada.